Cómo conocí a...

¡Buenas tardes!

¿Cómo os ha ido el fin de semana?. El viernes me fui a casa de unas amigas y entre tontería y tontería cayeron cinco botellas de cerveza. El sábado por la tarde me fui a una conferencia de la academia de ciencias. Han admitido a una amiga mía (ahí se codean los mejores empresarios, abogados, jueces...) y por la noche me fui a Cool.

¿Queréis que os cuente más sobre F.?

Después de leer el sms vi que estaba conectado en la blackberry e intenté hablarle, porque más bien yo me hacía la loca como si no supiera nada, pero en verdad mi amiga me lo había chivado todo. No contestó. 

Al día siguiente, recibí otro sms disculpándose por no haberme contestado, pero se había quedado durmiendo.

Estuvimos dos días sin vernos porque yo andaba demasiado liada. Universidad, trabajo, amigos, familia... demasiado complicado empezar a compaginar las cosas. Ya tenía problemas en casa con "a ver con quien sales".

Una noche, hablando por el chat me dijo que tenía que contarme rápidamente una cosa, porque no podía más, no dormía, y todas las parafernalias que nos gustan a las chicas. Ambos pensamos que era una forma muy cutre, pero allá que me dijo todo. 

Me confesó que estando en el cine quería haberme cogido la mano, haberme besado, pero ambos pensábamos lo mismo: no habíamos hablado.

Me comentó la idea de quedar para hablar las cosas cara a cara, así que yo le dije que me parecía bien. Volvimos a ir al Puerto, el cielo estaba precioso... nos sentamos en un banco al lado de las rocas, y me dijo que le gustaba, y bastante. Que hacía tiempo que estaba sintiendo cosas por mí y que había esperado a decírmelo porque tenía miedo a mi reacción.

Yo como le dije anteriormente, me quedé sin palabras, la verdad es que aunque lo supiera, no me lo esperaba... si apenas hablábamos casi.

Los días pasaron, y seguíamos quedando los cuatro, L. y su novio, y yo y F. ¿Queréis saber más?

¡Hasta mañana!